Instantes

jueves, 7 de julio de 2016

Una opresión,
la posibilidad de que el alma
se esfume en añicos,
microcristales errantes
rasgando el corazón.

Mi tan honesto rostro,
el retorno del mareo
que horas ha se había ido,
palabras que no logran formarse,
labios temblorosos que deben hablar.

Miradas rehuyentes
que se buscan para no verse,
sonrisas sinceras del alma
que no encajan en el rostro.

La unión callada
que siempre dice más.
El beso en el hombro
que murmura una disculpa,
la mudez y el temblor
que retienen la explosión
de las sales internas
voraces por crear un tsunami.

El dolor mal fingido
en un intento fallido,
por brindarte alivio.

Escribanos con confianza