Confesión fallida

Desde hace semanas quiero escribir sobre algo que anhela salir en mis letras, he planteado varias formas para iniciar el escrito, mas no he tenido demasiada suerte.

La primera era claramente una negativa a mis emociones:

No sé, sí sé; preferiría no saberlo.

 Sin embargo no pude continuar con éste texto que pretendía ser una confesión escondida.

El segundo texto lo hice como un análisis científico para tratar de descubrir "como la ciencia manda" lo que yace en mis emociones, así que puse manos a la obra para iniciar mi reporte de investigación:

Planteamiento del problema: Pienso todo el día en un hombre, cada que me acerco a él me alegro de sobre manera, sufro algún nerviosismo y en ocasiones se acelera mi corazón, el sólo recordar su rostro o mencionar su nombre ilumina mis ojos mágicamente.

Hipótesis: Amo a ese hombre.

Mas al comenzar a buscar los conceptos necesarios para el marco teórico descubrí que ni siquiera hay conceptos unificados para definir amar, además, aunque leí mis mejores libros de ciencia, busqué un sin fin de pruebas de laboratorio e hice algunas pruebas caseras, no encontré ningún experimento que pueda comprobar la capacidad de amor por otro.

Y aquí estoy nuevamente tratando de escribir lo que mis sentimientos dictan, pero pareciera que ya no hay vestigios de creatividad literaria en mí, lo cual en estos momentos es muy triste pues ansío gritarle por escrito a ese hombre tantas cosas...

...Quisiera poder decirle que, siendo fiel a lo que siento, quitando cualquier barrera que previamente me he puesto, puedo decirle que lo amo, sin medida y sin cadenas, que me engrandece su sola  presencia, que siento como una energía positiva se desborda por cada parte de mí cuando platicamos, que mirar sus ojos y disfrutar su aroma se han vuelto mis tareas preferidas para realizar durante el día. Me encantaría escribirle un poema en el cual, además de decirle todo eso pudiera también platicarle lo feliz que me hace enterarme que ha tenido un buen día y que deseo hondamente poder ayudarle en todo lo que lo hace crecer y lo hace ser feliz.

Deseo en verdad poder crear un escrito en que pueda decirle cuanto lo amo y cuanta felicidad me regala el saber que existe, expresarle que quiero darle  lo mejor de mi ser puesto que su sola presencia siempre me hace descubrir algo positivo en mí. Pero sobre todo quisiera decirle que yo no espero que él me ame y mucho menos que me agradezca, sólo deseo compartirle al menos una parte del maravilloso vórtice de emociones que ha creado en mí.

Lamentablemente, hace mucho que no escribo y ahora no he podido acomodar las palabras para hacerle llegar lo que siento y entonces seguiré disfrutando el darle todo mi amor, en secreto.