Despidiendo a un captor

jueves, 22 de diciembre de 2011

Consumes la energía que no tengo,
devoras la sed de libertad en mi,
empapas de agua salina mis pómulos abiertos,
obscureces el aro nocturno que rodea mi porvenir.

Desangras mis pies heridos de pasión,
inundas de dolor mi rasgada ilusión,
rompes lentamente mis días alegres,
y bañas de tristeza mis instantes.

Vampiro impío me desangras,
encajando muy despacio tus colmillos,
espectro cruel que me devoras,
aléjate o mátame ahora.

...

He decidido abandonar la noche,
escaparé tranquilamente de ti,
tú lo decides, o sucumbes, o mueres,
pues hoy decido liberarme al fin.

Escribanos con confianza