Análisis

viernes, 31 de marzo de 2017

No puedes ser tú, porque te faltan hilos de cuchillo en los cabellos,
y jamás he visto unicornios rondando desbocados tus ideas.
Dudo que pudieras comprender que llevarme a las estrellas,
implica caminar veredas cuesta arriba, y no ir en auto,
y mucho menos, desvestirme en algún motel de paso.

No eres tú, porque el arte no vibra en tu vida,
y no entenderías ni una de mis entrelíneas.
Lobillo falsamente domesticado,
que se cree merecedor del rebaño,
no sabes vencer una lucha con tus manos.

Podrías ser tú porque tu polo guía mi norte,
porque mis pulsaciones por minuto desvarían
simplemente al escuchar tu absurda risa.
Y no eres tú, no solo porque en tu mundo de seda
no cabe mi vida de múltiples fibras,
sino porque en tu mente lejana y medida,
ni siquiera un fragmento de la posibilidad cabría.

Escribanos con confianza